La UNESCO incorporó a la “Ciudad de las Escaleras” a la lista de sitios declarados Patrimonio Mundial el 13 de julio de 2006. Hoy, gracias al trabajo de restauración impulsado por la División El Teniente y la Fundación Sewell, a través de Fondos del Patrimonio Cultural, el campamento minero cuenta con restaurados y renovados espacios que invitan a recorrer la historia de la gran minería del cobre.
Sewell, el campamento minero emplazado a 2.140 metros de altura en la Cordillera de Los Andes, que llegó a albergar a 15 mil personas y que sentó las bases de la gran minería del cobre en Chile, cumple 17 años desde que fue incorporado a la lista de sitios declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO.
El lugar, conocido como la “Ciudad de las Escaleras”, está ubicado en el área de operaciones de Codelco División El Teniente, que junto a la Fundación Sewell y gracias a Fondos del Patrimonio Cultural han restaurado, recuperado y renovado espacios del histórico campamento.
En lo que va del año, el campamento minero ha sido visitado por trabajadores propios, de empresas colaboradoras, sus familias; organizaciones vecinales y comunitarias; y, próximamente, por escolares de la región de O’Higgins, en el marco de visitas extendidas por la división.
Germán Sandoval, gerente de Sustentabilidad y Asuntos Externos de El Teniente, manifestó que “para Codelco, Sewell es expresión de nuestro propósito de contribuir a la valoración del patrimonio y el desarrollo de los territorios donde realizamos nuestras operaciones, creando valor social. Contribuir al desarrollo regional y al conocimiento de la minería, a través de la actividad turística es un orgullo”.
La declaratoria
El 13 de julio de 2006, Sewell ingresó a la lista de sitios del Patrimonio Mundial de la Unesco, en la reunión organizada por el Comité del Patrimonio Mundial, en Vilnius, capital de Lituania, cuando se analizaron 37 casos que buscaban conseguir tal distinción.
Fue la culminación de un trabajo de 8 años, que se inició en 1998, cuando Sewell fue declarada Monumento Nacional y que terminó cuando quedó inscrita en la citada lista con el N° 1214.
José Pablo Arellano, presidente ejecutivo de Codelco en 2006, destacó que “declarar a Sewell como Patrimonio de la Humanidad es un compromiso y una responsabilidad para continuar con el trabajo de restauración y conservación de Sewell para que las actuales generaciones y las que vendrán puedan conocer en su fuente misma, el esfuerzo que hicieron esos compatriotas y extranjeros para comenzar la explotación del cobre de manera industrial en condiciones absolutamente precarias y desfavorables”.
La embajadora de Chile en Francia y ante la Unesco en aquella época, Pilar Armanet, destacó en su oportunidad que "se trata de un bien del patrimonio industrial y del patrimonio moderno el que se asocia a la mina de cobre subterránea más grande del mundo, en plena producción. Nos llena de orgullo de que se haya hecho expresa mención a la calidad del trabajo realizado y al de la presentación formulada. Este es el fruto del trabajo mancomunado entre los organismos públicos, Codelco y la comunidad local”.
Sewell es considerado un bien patrimonial debido a su área minera-industrial, a lo urbano-arquitectónico, y a lo social-cultural. Actualmente, su conservación y desarrollo está garantizada por un plan de manejo que gestiona la Fundación Sewell.