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Sat, Nov

La realidad de la Migración

Avisos Legales

En el contexto del Mes de la Solidaridad, la Comisión diocesana Justicia y Paz del Obispado de Rancagua organizó su tradicional foro panel entorno a esta temática para hacer un llamado a la integración.

En el marco del Mes de la Solidaridad, la Comisión diocesana Justicia y Paz del Obispado de Rancagua organiza cada año un foro panel para conversar sobre temáticas de interés social para la comunidad y a cuya realidad la Iglesia no está ajena.

En esta oportunidad, en el salón auditorio de la Municipalidad, el foro tuvo como objetivo abordar el fenómeno de la Migración, a través de la participación de tres panelistas: Carlos Klammer Borgoño, ex diplomático de carrera y embajador, miembro de la Comisión Diocesana Justicia y Paz; Carlos Baeza, coordinador regional del Departamento de Extranjería y Migración del Ministerio del Interior; y el presbítero Humberto Palma Orellana, encargado del Departamento Diocesano de Migrantes.

Los expositores dieron una mirada a la situación de la migración en nuestra región del Libertador, dando a conocer información sobre  quiénes son los migrantes, qué problemas enfrentan y cómo debemos acogerlos.

Al respecto, el obispo de Rancagua, monseñor Alejandro Goic karmelic señaló que “debemos acoger e integrar a los migrantes y dejarnos enriquecer por su cultura, como también ellos recibirán la nuestra”.

Se estima que en la Región de O’Higgins ya son más de 8 mil migrantes los que han llegado. Por eso, la diócesis de Rancagua hace aproximadamente cuatro años inició el esfuerzo de crear una Pastoral para los migrantes, que se ha ido consolidando en el tiempo presente.

En ese sentido, la Pastoral entregó el día del foro un documento denominado “Dónde está tu hermano”, donde se reflexiona sobre la situación de los migrantes y cómo se les está acogiendo y ayudando a insertarse en la comunidad, a través de diversas acciones que está llevando adelante la Iglesia.

“El fenómeno de la migración es un desafío que la Iglesia está asumiendo con mucha seriedad y profundidad”, enfatizó el Obispo de Rancagua.